He notado que estando en una ocficina cerrada no me dan ganas de escrbir, cuando ando en la calle caminando voy teniendo ideas geniales para escribir: entradas al blog, frases en busca de la inmortalidad, poemas, chaquetas; pero las voy olvidando con forme se van cerrando los espacios.
Salgo de casa dormido, justo afuera, sobre avenida C.I.N.C.O. pasa la combi, me subo y veo extraños, no extraños para mi, sino entre ellos, como todos en la gran ciudad, tomo churubusco y la avenida me parece amplis, pongo el iPod y las melodías van abriendo camino a las palabras y las ideas: suena: de rojot e ves bien, veo: muer delineando los ojos e invariablemente surge algo por escribir, y así más ideas surgen mientras avanzo por churubusco, bajo de la combi y camino acompado del solo y el ruido de ls turbinas mientras camino hacia al areopuerto, más ideas surgen, llego a la puerta, entre mi credencia, el estacionamiento es pequeño y las ideas empiezan a disolverse, entro a recepción, el techo es alto pero no tanto como el cielo, cruzo el pasillo que reduce mis ideas, llego a mi lugar, a 4 metros me quedan las paredes color crema y las ideas no están.
Quisiera que existiera el blog mental: de mi cerebro a la red.
Nota personal: Quisiera escribir mucho más.
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